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Momentos de mucha tensión se produjeron en la madrugada de la fecha en la Comisaría local, ocurrió cuando un grupo de detenidos comenzó una gresca que involucró a cinco de ellos.
En una circunstancia de mera casualidad calendario, hoy pudo conocerse a través de un parte de prensa municipal, las inquietudes formuladas por el Intendente al Ministro Stornenlli, en lo referente a las dificultades que plantea tener que alojar presos en las comisarías bonaerenses.
En forma textual, la información menciona que: “El Intendente Municipal, Dr. Fabián Zorzano, en nota remitida al Ministro de Seguridad Provincial, Dr. Carlos Stornelli, manifestó la preocupación compartida por varios Intendentes del interior provincial ante el constante envío hacia la Comisaría local de detenidos provenientes de comunas del conurbano bonaerense.
Zorzano indicó que estas acciones producen un efecto no buscado, alterando el modo de vida de nuestras sociedades y utilizando los contados efectivos policiales que prestan servicio en nuestra jurisdicción que deberían ser utilizados para patrullar calles y caminos vecinales.
El jefe comunal recordó al Ministro los acontecimientos del 14 de Enero último, cuando fue hallado muerto en el interior de un camión de traslado un detenido”.
El tema lejos de solucionarse se agrava por la carencia de espacios con que cuentan las cárceles de la Provincia, abarrotadas de detenidos y cuya “solución” es la de derivar el problema a los municipios del interior; con el agravante de remitir personas con frondosos antecedentes, pudiendo definirse a algunos de ellos como “pesados”, tal como se ubica en el ambiente del delito a todos aquellos que cuentan en su prontuario, la participación en casos considerados como graves.
Para abonar los argumentos anteriores, basta con señalar que en la mañana de hoy llegaron a nuestra ciudad, tres nuevos detenidos, para completar un total de ocho, alojados en las dos celdas disponibles.
Al tratarse de presos provenientes de lugares muy distantes de Coronel Dorrego, especialmente
del conurbano, se plantea una situación de incomodidad y malestar en éstos por algunas razones puntuales:
- Carencia de las denominadas “visitas higiénicas”.
- Dificultades de comunicación y contacto frecuente con su familia.
- Falta de espacios acordes para el desarrollo de actividades o prácticas deportivas.
Otra cuestión que resulta clave recordar, radica en la falta de preparación y experiencia de los efectivos policiales, al tener que asumir la responsabilidad de “guardia cárceles”, función que requiere de un adiestramiento especial.
Muy distinto es vigilar o controlar delincuentes lugareños, a tener que enfrentar contingencias como las relatadas anteriormente, particularmente ante jóvenes que dominan los códigos “tumberos” y conocen como manejarse en este tipo de refriegas.
Debe recordarse que oportunamente el gobierno provincial, destinó fondos para refaccionar los calabozos, otorgándoles varias medidas de seguridad.
La “contribución” perseguía un fin determinado: instalar pequeñas “alcaldías” en cada ciudad bonaerense; sin importar el impacto comunitario de la medida, sin considerar debidamente los múltiples problemas que genera.
Mientras unos 100.000 pesos se orientaron a esos fines, puede observarse como el antiguo edificio policial dorreguense, exhibe un importante deterioro, especialmente en lo concerniente a los techos, siendo la sala de guardia una triste muestra de los problemas edilicios que presenta dicha repartición pública.
Oportunamente fue la Municipalidad la que debió contribuir para concretar algunas refacciones internas y tareas de pintura; la que también debe asistir en materia de reparaciones de vehículos y otros gastos que son competencia provincial.
A pesar de las medidas se seguridad y reformas edilicias realizadas tiempo atrás, la Comisaría no es el lugar más apto para la detención de personas.
Asimismo implica afectar personal a tareas de custodia, teniendo que descuidar la misión especifica de la función policial, que es la de actuar en prevención del delito, custodiando vidas y bienes de la comunidad.
En una circunstancia de mera casualidad calendario, hoy pudo conocerse a través de un parte de prensa municipal, las inquietudes formuladas por el Intendente al Ministro Stornenlli, en lo referente a las dificultades que plantea tener que alojar presos en las comisarías bonaerenses.
En forma textual, la información menciona que: “El Intendente Municipal, Dr. Fabián Zorzano, en nota remitida al Ministro de Seguridad Provincial, Dr. Carlos Stornelli, manifestó la preocupación compartida por varios Intendentes del interior provincial ante el constante envío hacia la Comisaría local de detenidos provenientes de comunas del conurbano bonaerense.
Zorzano indicó que estas acciones producen un efecto no buscado, alterando el modo de vida de nuestras sociedades y utilizando los contados efectivos policiales que prestan servicio en nuestra jurisdicción que deberían ser utilizados para patrullar calles y caminos vecinales.
El jefe comunal recordó al Ministro los acontecimientos del 14 de Enero último, cuando fue hallado muerto en el interior de un camión de traslado un detenido”.
El tema lejos de solucionarse se agrava por la carencia de espacios con que cuentan las cárceles de la Provincia, abarrotadas de detenidos y cuya “solución” es la de derivar el problema a los municipios del interior; con el agravante de remitir personas con frondosos antecedentes, pudiendo definirse a algunos de ellos como “pesados”, tal como se ubica en el ambiente del delito a todos aquellos que cuentan en su prontuario, la participación en casos considerados como graves.
Para abonar los argumentos anteriores, basta con señalar que en la mañana de hoy llegaron a nuestra ciudad, tres nuevos detenidos, para completar un total de ocho, alojados en las dos celdas disponibles.
Al tratarse de presos provenientes de lugares muy distantes de Coronel Dorrego, especialmente
del conurbano, se plantea una situación de incomodidad y malestar en éstos por algunas razones puntuales:
- Carencia de las denominadas “visitas higiénicas”.
- Dificultades de comunicación y contacto frecuente con su familia.
- Falta de espacios acordes para el desarrollo de actividades o prácticas deportivas.
Otra cuestión que resulta clave recordar, radica en la falta de preparación y experiencia de los efectivos policiales, al tener que asumir la responsabilidad de “guardia cárceles”, función que requiere de un adiestramiento especial.
Muy distinto es vigilar o controlar delincuentes lugareños, a tener que enfrentar contingencias como las relatadas anteriormente, particularmente ante jóvenes que dominan los códigos “tumberos” y conocen como manejarse en este tipo de refriegas.
Debe recordarse que oportunamente el gobierno provincial, destinó fondos para refaccionar los calabozos, otorgándoles varias medidas de seguridad.
La “contribución” perseguía un fin determinado: instalar pequeñas “alcaldías” en cada ciudad bonaerense; sin importar el impacto comunitario de la medida, sin considerar debidamente los múltiples problemas que genera.
Mientras unos 100.000 pesos se orientaron a esos fines, puede observarse como el antiguo edificio policial dorreguense, exhibe un importante deterioro, especialmente en lo concerniente a los techos, siendo la sala de guardia una triste muestra de los problemas edilicios que presenta dicha repartición pública.
Oportunamente fue la Municipalidad la que debió contribuir para concretar algunas refacciones internas y tareas de pintura; la que también debe asistir en materia de reparaciones de vehículos y otros gastos que son competencia provincial.
A pesar de las medidas se seguridad y reformas edilicias realizadas tiempo atrás, la Comisaría no es el lugar más apto para la detención de personas.
Asimismo implica afectar personal a tareas de custodia, teniendo que descuidar la misión especifica de la función policial, que es la de actuar en prevención del delito, custodiando vidas y bienes de la comunidad.
