
Consideró que "los más de 100 milímetros caídos, permitirán una importante recuperación de los cultivos".
"Otro aspecto beneficioso para considerar es la infiltración gradual del agua en los suelos, ya que la lluvia se prolongó durante varios días", sostuvo el profesional.
De todas formas, Martínez estimó que "en octubre o noviembre, se necesitarían más precipitaciones, fundamentalmente para el trigo."
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