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La causa que se inició por el asalto a una parrilla de Monte Hermoso, y que derivó en la investigación contra policías de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local, por diversos delitos, se definirá en juicio oral y público a mediados de este año.
Así lo resolvió el Tribunal en lo Criminal Nº 3, al fijar fecha de debate para los días 14 y 15 de junio próximos, contra Sebastián Alfredo Bellegia (25) y Federico Jonathan Longiarú (22).
Ambos están imputados de robo agravado, entre otros ilícitos y serán asesorados por los abogados Gustavo Barbieri (oficial), en el caso de Bellegia, y Claudio Lofvall (Longiarú), mientras que el doctor Sebastián Foglia será fiscal de juicio.
El caso estará a cargo de los jueces Daniela Fabiana Castaño, Raúl Guillermo López Camelo y Gabriel Luis Rojas.
A Bellegia y Longiarú se les imputa, principalmente, ser quienes, el 19 de enero del año pasado, cometieron el atraco contra la familia de Luis Cariac, quien regentea la parrilla Luisito, en Monte Hermoso, y que fuera despojado de unos 90 mil pesos.
Horas después del atraco, que tuvo por víctimas a Cariac; su mujer, Adriana Borelli y el sereno del comercio, Juan Valdebenito, la policía montehermoseña detuvo a Bellegia y le secuestró unos 44.000 pesos (casi la mitad del botín) y luego a Longiarú.
Este último fue arrestado durante un allanamiento en la vivienda de la calle Roberto Zabala (ex Río Colorado) 372, cuyos propietarios eran ajenos al hecho, dijo entonces la policía.
En poder de Longiarú, con domicilio en nuestra ciudad, aparecieron 1.300 pesos que corresponderían al botín del atraco en la parrilla, un revólver calibre 22 cargado, un handy (similar al que portaba Bellegia, quien también estaba armado), cuatro teléfonos celulares y dos anillos sustraídos a Borelli.
El resto del botín, nunca apareció.
De la revisión de las llamadas y mensajes de texto de los teléfonos de los acusados, surgió que hubo reiterados contactos telefónicos entre Longiarú y el teniente Daniel Reynaldo Mile, de la DDI, quien, supuestamente, iba a "rescatar" al presunto ladrón de la localidad balnearia, en una camioneta de la DDI, aunque antes de ello el sujeto fue arrestado por la policía montehermoseña y su fuga se frustró.
Se observó que entre ambos hubo comunicaciones directas y a través de otras personas, con SMS que corroboran el contacto.
"Longiarú llamó en tres oportunidades al abonado de Mile a las 7.58, 8.13 y 8.49 de la mañana del hecho", detalló entonces un informante.
Luego, el policía sospechado se habría comunicado en nueve ocasiones, desde otro teléfono que solía utilizar, con la línea fija del sitio donde paraba Longiarú después del asalto, "a las 8.13, 8.25, 8.34, 8.49, 12.39, 12.47, 15.02, 15.50 y 16.34", agregó.
Esas mismas intervenciones telefónicas abrieron el camino hacia otras dos causas, por asociación ilícita y cohecho, y generaron allanamientos en la sede de la DDI, Pueyrredón 30, y en la casa de Mile, así como en otros domicilios.
También se requisaron el desarmadero de Cabildo de Oscar Fernández (recientemente detenido al encontrarse en su taller de la vecina localidad algunos vehículos malhabidos), locales comerciales, un lavadero, una oficina y un taller, pero sin que se produjeran otras detenciones.
Los operativos fueron encabezados por el fiscal Foglia, con el soporte de medio centenar de policías federales que llegaron desde Azul, Olavarría y Tandil.
Con el correr de los días, se fueron clausurando distintos locales nocturnos y casas de cita de nuestro medio y la región, a cuyos titulares, al parecer, el policía imputado les pedía coimas para permitir sus funcionamientos.
En este caso, también fueron vinculados el subteniente Néstor Linaza, el oficial principal Yamil Pinedo y el comisario inspector Carlos Alberto Testini, ex titular de la DDI. (26.04.10)
FUENTE: La Nueva Provincia
Así lo resolvió el Tribunal en lo Criminal Nº 3, al fijar fecha de debate para los días 14 y 15 de junio próximos, contra Sebastián Alfredo Bellegia (25) y Federico Jonathan Longiarú (22).
Ambos están imputados de robo agravado, entre otros ilícitos y serán asesorados por los abogados Gustavo Barbieri (oficial), en el caso de Bellegia, y Claudio Lofvall (Longiarú), mientras que el doctor Sebastián Foglia será fiscal de juicio.
El caso estará a cargo de los jueces Daniela Fabiana Castaño, Raúl Guillermo López Camelo y Gabriel Luis Rojas.
A Bellegia y Longiarú se les imputa, principalmente, ser quienes, el 19 de enero del año pasado, cometieron el atraco contra la familia de Luis Cariac, quien regentea la parrilla Luisito, en Monte Hermoso, y que fuera despojado de unos 90 mil pesos.
Horas después del atraco, que tuvo por víctimas a Cariac; su mujer, Adriana Borelli y el sereno del comercio, Juan Valdebenito, la policía montehermoseña detuvo a Bellegia y le secuestró unos 44.000 pesos (casi la mitad del botín) y luego a Longiarú.
Este último fue arrestado durante un allanamiento en la vivienda de la calle Roberto Zabala (ex Río Colorado) 372, cuyos propietarios eran ajenos al hecho, dijo entonces la policía.
En poder de Longiarú, con domicilio en nuestra ciudad, aparecieron 1.300 pesos que corresponderían al botín del atraco en la parrilla, un revólver calibre 22 cargado, un handy (similar al que portaba Bellegia, quien también estaba armado), cuatro teléfonos celulares y dos anillos sustraídos a Borelli.
El resto del botín, nunca apareció.
De la revisión de las llamadas y mensajes de texto de los teléfonos de los acusados, surgió que hubo reiterados contactos telefónicos entre Longiarú y el teniente Daniel Reynaldo Mile, de la DDI, quien, supuestamente, iba a "rescatar" al presunto ladrón de la localidad balnearia, en una camioneta de la DDI, aunque antes de ello el sujeto fue arrestado por la policía montehermoseña y su fuga se frustró.
Se observó que entre ambos hubo comunicaciones directas y a través de otras personas, con SMS que corroboran el contacto.
"Longiarú llamó en tres oportunidades al abonado de Mile a las 7.58, 8.13 y 8.49 de la mañana del hecho", detalló entonces un informante.
Luego, el policía sospechado se habría comunicado en nueve ocasiones, desde otro teléfono que solía utilizar, con la línea fija del sitio donde paraba Longiarú después del asalto, "a las 8.13, 8.25, 8.34, 8.49, 12.39, 12.47, 15.02, 15.50 y 16.34", agregó.
Esas mismas intervenciones telefónicas abrieron el camino hacia otras dos causas, por asociación ilícita y cohecho, y generaron allanamientos en la sede de la DDI, Pueyrredón 30, y en la casa de Mile, así como en otros domicilios.
También se requisaron el desarmadero de Cabildo de Oscar Fernández (recientemente detenido al encontrarse en su taller de la vecina localidad algunos vehículos malhabidos), locales comerciales, un lavadero, una oficina y un taller, pero sin que se produjeran otras detenciones.
Los operativos fueron encabezados por el fiscal Foglia, con el soporte de medio centenar de policías federales que llegaron desde Azul, Olavarría y Tandil.
Con el correr de los días, se fueron clausurando distintos locales nocturnos y casas de cita de nuestro medio y la región, a cuyos titulares, al parecer, el policía imputado les pedía coimas para permitir sus funcionamientos.
En este caso, también fueron vinculados el subteniente Néstor Linaza, el oficial principal Yamil Pinedo y el comisario inspector Carlos Alberto Testini, ex titular de la DDI. (26.04.10)
FUENTE: La Nueva Provincia
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