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En la víspera la Escuela Agropecuaria de Coronel Dorrego cumplió su 23º aniversario de vida institucional, fecha que pasó un tanto desapercibida para la comunidad, consecuencia de un día sin actividades.
Atento a estas circunstancias es que decidí desempolvar viejos papeles, trayendo al positivo presente de este establecimiento una serie de datos que hablan de los pasos dados en el pasado, cuando un grupo de vecinos comenzó a trabajar en la idea de una “Escuela Agraria”.
El 15 de Octubre de 1984 se desarrolló en dependencias de la Escuela Técnica, cuya Directora era Elsa de Seeliger una reunión que había sido convocada por el Consejo Escolar, con el propósito de analizar la incorporación de esta nueva especialidad.
Del encuentro participaron autoridades educativas, municipales y representantes de distintas entidades relacionadas con el sector agropecuario, comercial e industrial dorreguense.
Un protagonismo importante en el tema tuvo el entonces legislador provincial, Osvaldo Crego (UCR), que llevó adelante distintas gestiones, impulsando desde la Cámara de Diputados la creación de esta modalidad en el distrito.
Al hacer referencia al tema, expresó que: “una vez más gobierno y pueblo, comprenden que solamente en un sistema participativo se lograrán alcanzar los objetivos educacionales propuestos por la democracia…”
En tanto el Intendente José Francisco Nondedeu (1983-1987) y el Concejo Deliberante que era presidido por el Contador Raúl Reyes, acompañaron con fuerza el pedido, ofreciendo 10 hectáreas de campo en el Aero Club, una extensión de tierra e instalaciones en el Vivero Parque y hasta un colectivo para el traslado de alumnos.
Asimismo se conformó una Comisión de Apoyo “Pro-creación de la Escuela Agropecuaria, ocupando la Presidencia y Vicepresidencia, los señores Omar Favre y Néstor Ercoli, logrando en apenas una semana 120 socios adherentes y mostrándose ambos complacidos por la respuesta obtenida.
En aquellos tiempos compartíamos con Rodolfo Miguel Marcó la Dirección de la Revista “Todos”, destacando en una nota editorial de Noviembre de 1984: “La Escuela Agraria es una realidad porque somos un partido que basa sus posibilidades económicas en el campo y es hora de entender que a través de la aplicación de nuevas técnicas y conocimientos se alcanzarán los resultados deseados y lo que es más importante: serán los jóvenes quienes van a adquirir la capacidad necesaria para entregarla al servicio de la tierra que conocieron desde su nacimiento…”
Entre 1985 y 1987 funcionó como apéndice de la Escuela Técnica, para luego lograr la autonomía, siendo su primera Directora, Mirta Arienti de Fernández, destacada profesional que contribuyó al afianzamiento institucional del establecimiento.
En 1999, en la última etapa de administración justicialista de Pedro Juan Testani, se inauguraron las nuevas instalaciones, dotadas de una infraestructura de excelencia.
En la actualidad la Profesora Celia Rodríguez ejerce la Dirección, concurriendo diariamente unos 150 alumnos que cursan la carrera de Técnico Agropecuario, proviniendo varios de ellos de la zona rural y localidades del distrito, hospedándose en su albergue. Como reconocimiento a su calidad educativa, cuenta con un anexo en la localidad de Micaela Cascallares (Partido de Tres Arroyos).
Las actividades productivas (muchas de ellas al aire libre) son la columna vertebral de su propuesta curricular, destacándose el mantenimiento de una huerta tradicional y secciones como: Porcicultura, Cunicultora y Avicultura.
Un símbolo distintivo de su propuesta está dado por la presencia de su “tambo ovino”, de características únicas en el sur bonaerense y verdadero orgullo de los dorreguenses, el cual comenzó con sus tareas en 1988.
Las ovejas que se crían son de la raza “frisona”, contándose con un reproductor de pedigrí, lo cual garantiza la conformación de un plantel de calidad.
Se producen unos 15 litros diarios de leche, los cuales son conservados, produciendo luego quesos artesanales en una única especialidad, los cuales son muy solicitados por el público local, dado la salubridad, excelente presentación y particular sabor.
Las tareas de elaboración son concretadas por alumnas y alumnos del último año de la carrera, cuidándose todos y cada uno de los detalles referidos a la higiene y su posterior mantenimiento. Como Maestros de Sección actúan los docentes: Eugenia de Dios y Gustavo Madariaga, en tanto que Fabián Brusa es el jefe del área.
Importantes han sido los logros de sus alumnos en distintos eventos y muestras nacionales; muchos de ellos han proseguido sus estudios en niveles terciarios y universitarios, mientras que otros -producto de la formación lograda- se desempeñan con idoneidad en tareas relacionadas al agro y la industria.
El crecimiento de la actividad olivícola abre nuevas posibilidades a sus alumnos, estableciéndose un convenio de pasantías con la firma “La Comarca”, donde adquieren conocimientos referidos a este tipo de explotaciones productivas.
La Escuela Agropecuaria exige de una presencia diaria de docentes y colaboradores (aún los fines de semana), lo que demuestra el cariño, el compromiso y la responsabilidad de cada uno de ellos, atendiendo tareas que no se permiten feriados o descansos.
Con un cuarto de siglo de historia y con 23 años de identidad, la Escuela Agropecuaria transita sus días por los positivos surcos del éxito, habiendo consolidado un proyecto que ha permitido lograr los mejores frutos de su cosecha educativa: “cientos de egresados que son el sustento mayor de su proba trayectoria”.
Atento a estas circunstancias es que decidí desempolvar viejos papeles, trayendo al positivo presente de este establecimiento una serie de datos que hablan de los pasos dados en el pasado, cuando un grupo de vecinos comenzó a trabajar en la idea de una “Escuela Agraria”.
El 15 de Octubre de 1984 se desarrolló en dependencias de la Escuela Técnica, cuya Directora era Elsa de Seeliger una reunión que había sido convocada por el Consejo Escolar, con el propósito de analizar la incorporación de esta nueva especialidad.
Del encuentro participaron autoridades educativas, municipales y representantes de distintas entidades relacionadas con el sector agropecuario, comercial e industrial dorreguense.
Un protagonismo importante en el tema tuvo el entonces legislador provincial, Osvaldo Crego (UCR), que llevó adelante distintas gestiones, impulsando desde la Cámara de Diputados la creación de esta modalidad en el distrito.
Al hacer referencia al tema, expresó que: “una vez más gobierno y pueblo, comprenden que solamente en un sistema participativo se lograrán alcanzar los objetivos educacionales propuestos por la democracia…”
En tanto el Intendente José Francisco Nondedeu (1983-1987) y el Concejo Deliberante que era presidido por el Contador Raúl Reyes, acompañaron con fuerza el pedido, ofreciendo 10 hectáreas de campo en el Aero Club, una extensión de tierra e instalaciones en el Vivero Parque y hasta un colectivo para el traslado de alumnos.
Asimismo se conformó una Comisión de Apoyo “Pro-creación de la Escuela Agropecuaria, ocupando la Presidencia y Vicepresidencia, los señores Omar Favre y Néstor Ercoli, logrando en apenas una semana 120 socios adherentes y mostrándose ambos complacidos por la respuesta obtenida.
En aquellos tiempos compartíamos con Rodolfo Miguel Marcó la Dirección de la Revista “Todos”, destacando en una nota editorial de Noviembre de 1984: “La Escuela Agraria es una realidad porque somos un partido que basa sus posibilidades económicas en el campo y es hora de entender que a través de la aplicación de nuevas técnicas y conocimientos se alcanzarán los resultados deseados y lo que es más importante: serán los jóvenes quienes van a adquirir la capacidad necesaria para entregarla al servicio de la tierra que conocieron desde su nacimiento…”
Entre 1985 y 1987 funcionó como apéndice de la Escuela Técnica, para luego lograr la autonomía, siendo su primera Directora, Mirta Arienti de Fernández, destacada profesional que contribuyó al afianzamiento institucional del establecimiento.
En 1999, en la última etapa de administración justicialista de Pedro Juan Testani, se inauguraron las nuevas instalaciones, dotadas de una infraestructura de excelencia.
En la actualidad la Profesora Celia Rodríguez ejerce la Dirección, concurriendo diariamente unos 150 alumnos que cursan la carrera de Técnico Agropecuario, proviniendo varios de ellos de la zona rural y localidades del distrito, hospedándose en su albergue. Como reconocimiento a su calidad educativa, cuenta con un anexo en la localidad de Micaela Cascallares (Partido de Tres Arroyos).
Las actividades productivas (muchas de ellas al aire libre) son la columna vertebral de su propuesta curricular, destacándose el mantenimiento de una huerta tradicional y secciones como: Porcicultura, Cunicultora y Avicultura.
Un símbolo distintivo de su propuesta está dado por la presencia de su “tambo ovino”, de características únicas en el sur bonaerense y verdadero orgullo de los dorreguenses, el cual comenzó con sus tareas en 1988.
Las ovejas que se crían son de la raza “frisona”, contándose con un reproductor de pedigrí, lo cual garantiza la conformación de un plantel de calidad.
Se producen unos 15 litros diarios de leche, los cuales son conservados, produciendo luego quesos artesanales en una única especialidad, los cuales son muy solicitados por el público local, dado la salubridad, excelente presentación y particular sabor.
Las tareas de elaboración son concretadas por alumnas y alumnos del último año de la carrera, cuidándose todos y cada uno de los detalles referidos a la higiene y su posterior mantenimiento. Como Maestros de Sección actúan los docentes: Eugenia de Dios y Gustavo Madariaga, en tanto que Fabián Brusa es el jefe del área.
Importantes han sido los logros de sus alumnos en distintos eventos y muestras nacionales; muchos de ellos han proseguido sus estudios en niveles terciarios y universitarios, mientras que otros -producto de la formación lograda- se desempeñan con idoneidad en tareas relacionadas al agro y la industria.
El crecimiento de la actividad olivícola abre nuevas posibilidades a sus alumnos, estableciéndose un convenio de pasantías con la firma “La Comarca”, donde adquieren conocimientos referidos a este tipo de explotaciones productivas.
La Escuela Agropecuaria exige de una presencia diaria de docentes y colaboradores (aún los fines de semana), lo que demuestra el cariño, el compromiso y la responsabilidad de cada uno de ellos, atendiendo tareas que no se permiten feriados o descansos.
Con un cuarto de siglo de historia y con 23 años de identidad, la Escuela Agropecuaria transita sus días por los positivos surcos del éxito, habiendo consolidado un proyecto que ha permitido lograr los mejores frutos de su cosecha educativa: “cientos de egresados que son el sustento mayor de su proba trayectoria”.
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