Una cacería polémica: el "debate que se disparó sobre esa actividad local"
Después de la carta publicada por LA DORREGO, cuyo autor, Guillermo Meana, hablaba sobre la protección de especies migratorias, varios lectores opinaron al respecto. El debate está en marcha. VER
5 comentarios:
GUILLERMO MEANA
dijo...
Sr. Anónimo
Voy a responder su fundamentado comentario en atención a que a lo largo del mismo Ud. expone una serie de consideraciones de peso, que a mi entender, merecen una respuesta. Respuesta que no debería darle, a quien se presenta “camuflado” detrás del anonimato… pero lo voy ha hacer por respeto a nuestros lectores, que merecen que al menos uno de los contendientes, se comporte como un caballero, levante su visera y de la cara.
En primer lugar quiero aclararle que no tengo nada en contra de la práctica de la caza deportiva, de hecho es un deporte que respeto y que en el pasado he practicado con cierta asiduidad. No soy un ecologista “fundamentalista” ni mucho menos y entiendo la importancia económica que la actividad turística y deportiva puede llegar a tener en la región.
Quizá Ud., perdió de vista la esencia de mi nota, que no tiene que ver con lo “ecológico”, sino con lo jurídico.
A mi francamente lo que me molesta, es que no se respeten las leyes nacionales y provinciales vigentes, que en razón de la “conveniencia” de algunos, se vulnere el estado de derecho, que es de todos.
El ámbito para discutir, modificar y sancionar leyes es el Congreso y la Legislatura, no el casco de las estancias, ni los cotos de caza (autorizados o no).
Los ciudadanos tenemos la obligación de cumplir y hacer cumplir nuestras leyes, derogarlas o modificarlas, es tarea de nuestros representantes.
Como verá… Ud. me cambió de “materia”… me dio una lección de bióloga, zoología y economía turística… pero en la clase de “Formación Cívica”. Y por más argumentos que Ud., exprese, el texto de la ley permanece incólume y vigente y la prohibición de cazar estas especies se extiende a todo el territorio nacional y que yo sepa, el partido de Coronel Dorrego, sigue perteneciendo a la Provincia de Buenos Aires, una de las provincias que conforman la Republica Argentina.
Mientras cazar cauquenes sea un delito, las autoridades y los ciudadanos tenemos la obligación de impedirlo.
Y le digo mas, cumplir la ley es una obligación de todos. No se trata de lo que me gusta me beneficia o me parece correcto. Por ejemplo, a mi me gustaría retar a duelo a un “señor” que visita maestras comprometidas con la defensa del medio ambiente y les imparte veladas amenazas, porque ciertas campañas de concientización que realizan las indefensas docentes, afectan sus oscuros intereses. Pero como esta penado por los Arts. 97, 98 y 99 del Código Penal, no lo hago. Ve amigo anónimo, todos tenemos que hacer lo que manda la ley, aunque a veces, nos quedemos con las ganas.
Voy a responder su fundamentado comentario en atención a que a lo largo del mismo Ud. expone una serie de consideraciones de peso, que a mi entender, merecen una respuesta. Respuesta que no debería darle, a quien se presenta “camuflado” detrás del anonimato… pero lo voy ha hacer por respeto a nuestros lectores, que merecen que al menos uno de los contendientes, se comporte como un caballero, levante su visera y de la cara.
En primer lugar quiero aclararle que no tengo nada en contra de la práctica de la caza deportiva, de hecho es un deporte que respeto y que en el pasado he practicado con cierta asiduidad. No soy un ecologista “fundamentalista” ni mucho menos y entiendo la importancia económica que la actividad turística y deportiva puede llegar a tener en la región.
Quizá Ud., perdió de vista la esencia de mi nota, que no tiene que ver con lo “ecológico”, sino con lo jurídico.
A mi francamente lo que me molesta, es que no se respeten las leyes nacionales y provinciales vigentes, que en razón de la “conveniencia” de algunos, se vulnere el estado de derecho, que es de todos.
El ámbito para discutir, modificar y sancionar leyes es el Congreso y la Legislatura, no el casco de las estancias, ni los cotos de caza (autorizados o no).
Los ciudadanos tenemos la obligación de cumplir y hacer cumplir nuestras leyes, derogarlas o modificarlas, es tarea de nuestros representantes.
Como verá… Ud. me cambió de “materia”… me dio una lección de bióloga, zoología y economía turística… pero en la clase de “Formación Cívica”. Y por más argumentos que Ud., exprese, el texto de la ley permanece incólume y vigente y la prohibición de cazar estas especies se extiende a todo el territorio nacional y que yo sepa, el partido de Coronel Dorrego, sigue perteneciendo a la Provincia de Buenos Aires, una de las provincias que conforman la Republica Argentina.
Mientras cazar cauquenes sea un delito, las autoridades y los ciudadanos tenemos la obligación de impedirlo.
Y le digo mas, cumplir la ley es una obligación de todos. No se trata de lo que me gusta me beneficia o me parece correcto. Por ejemplo, a mi me gustaría retar a duelo a un “señor” que visita maestras comprometidas con la defensa del medio ambiente y les imparte veladas amenazas, porque ciertas campañas de concientización que realizan las indefensas docentes, afectan sus oscuros intereses. Pero como esta penado por los Arts. 97, 98 y 99 del Código Penal, no lo hago. Ve amigo anónimo, todos tenemos que hacer lo que manda la ley, aunque a veces, nos quedemos con las ganas.
Pero mira donde lo encuentro al Indio Meana… (que raro… vos contra los molinos… jaja) decile al coso ese del coto, que porque mejor no se pone a cazar gringos con blowpipe. Seguro que nos tiene de clientes, a la 602 al completo, digo. Un abrazo desde Córdoba.
como dijo el genral: haz lo que yo digo pero no lo que yo hago!!!. MENEM, KIRCHNER y TODOS LOS DESCENDIENTES DEL GENERAL HACEN LO MISMO, que no es exactamente lo que vos mencionas NAHUEL.
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5 comentarios:
Sr. Anónimo
Voy a responder su fundamentado comentario en atención a que a lo largo del mismo Ud. expone una serie de consideraciones de peso, que a mi entender, merecen una respuesta. Respuesta que no debería darle, a quien se presenta “camuflado” detrás del anonimato… pero lo voy ha hacer por respeto a nuestros lectores, que merecen que al menos uno de los contendientes, se comporte como un caballero, levante su visera y de la cara.
En primer lugar quiero aclararle que no tengo nada en contra de la práctica de la caza deportiva, de hecho es un deporte que respeto y que en el pasado he practicado con cierta asiduidad. No soy un ecologista “fundamentalista” ni mucho menos y entiendo la importancia económica que la actividad turística y deportiva puede llegar a tener en la región.
Quizá Ud., perdió de vista la esencia de mi nota, que no tiene que ver con lo “ecológico”, sino con lo jurídico.
A mi francamente lo que me molesta, es que no se respeten las leyes nacionales y provinciales vigentes, que en razón de la “conveniencia” de algunos, se vulnere el estado de derecho, que es de todos.
El ámbito para discutir, modificar y sancionar leyes es el Congreso y la Legislatura, no el casco de las estancias, ni los cotos de caza (autorizados o no).
Los ciudadanos tenemos la obligación de cumplir y hacer cumplir nuestras leyes, derogarlas o modificarlas, es tarea de nuestros representantes.
Como verá… Ud. me cambió de “materia”… me dio una lección de bióloga, zoología y economía turística… pero en la clase de “Formación Cívica”. Y por más argumentos que Ud., exprese, el texto de la ley permanece incólume y vigente y la prohibición de cazar estas especies se extiende a todo el territorio nacional y que yo sepa, el partido de Coronel Dorrego, sigue perteneciendo a la Provincia de Buenos Aires, una de las provincias que conforman la Republica Argentina.
Mientras cazar cauquenes sea un delito, las autoridades y los ciudadanos tenemos la obligación de impedirlo.
Y le digo mas, cumplir la ley es una obligación de todos. No se trata de lo que me gusta me beneficia o me parece correcto. Por ejemplo, a mi me gustaría retar a duelo a un “señor” que visita maestras comprometidas con la defensa del medio ambiente y les imparte veladas amenazas, porque ciertas campañas de concientización que realizan las indefensas docentes, afectan sus oscuros intereses. Pero como esta penado por los Arts. 97, 98 y 99 del Código Penal, no lo hago. Ve amigo anónimo, todos tenemos que hacer lo que manda la ley, aunque a veces, nos quedemos con las ganas.
Guillermo Meana
Sr. Anónimo
Voy a responder su fundamentado comentario en atención a que a lo largo del mismo Ud. expone una serie de consideraciones de peso, que a mi entender, merecen una respuesta. Respuesta que no debería darle, a quien se presenta “camuflado” detrás del anonimato… pero lo voy ha hacer por respeto a nuestros lectores, que merecen que al menos uno de los contendientes, se comporte como un caballero, levante su visera y de la cara.
En primer lugar quiero aclararle que no tengo nada en contra de la práctica de la caza deportiva, de hecho es un deporte que respeto y que en el pasado he practicado con cierta asiduidad. No soy un ecologista “fundamentalista” ni mucho menos y entiendo la importancia económica que la actividad turística y deportiva puede llegar a tener en la región.
Quizá Ud., perdió de vista la esencia de mi nota, que no tiene que ver con lo “ecológico”, sino con lo jurídico.
A mi francamente lo que me molesta, es que no se respeten las leyes nacionales y provinciales vigentes, que en razón de la “conveniencia” de algunos, se vulnere el estado de derecho, que es de todos.
El ámbito para discutir, modificar y sancionar leyes es el Congreso y la Legislatura, no el casco de las estancias, ni los cotos de caza (autorizados o no).
Los ciudadanos tenemos la obligación de cumplir y hacer cumplir nuestras leyes, derogarlas o modificarlas, es tarea de nuestros representantes.
Como verá… Ud. me cambió de “materia”… me dio una lección de bióloga, zoología y economía turística… pero en la clase de “Formación Cívica”. Y por más argumentos que Ud., exprese, el texto de la ley permanece incólume y vigente y la prohibición de cazar estas especies se extiende a todo el territorio nacional y que yo sepa, el partido de Coronel Dorrego, sigue perteneciendo a la Provincia de Buenos Aires, una de las provincias que conforman la Republica Argentina.
Mientras cazar cauquenes sea un delito, las autoridades y los ciudadanos tenemos la obligación de impedirlo.
Y le digo mas, cumplir la ley es una obligación de todos. No se trata de lo que me gusta me beneficia o me parece correcto. Por ejemplo, a mi me gustaría retar a duelo a un “señor” que visita maestras comprometidas con la defensa del medio ambiente y les imparte veladas amenazas, porque ciertas campañas de concientización que realizan las indefensas docentes, afectan sus oscuros intereses. Pero como esta penado por los Arts. 97, 98 y 99 del Código Penal, no lo hago. Ve amigo anónimo, todos tenemos que hacer lo que manda la ley, aunque a veces, nos quedemos con las ganas.
Guillermo Meana
como dijo el general: dentro de la ley todo... fuera de la ley NADA
Pero mira donde lo encuentro al Indio Meana… (que raro… vos contra los molinos… jaja) decile al coso ese del coto, que porque mejor no se pone a cazar gringos con blowpipe. Seguro que nos tiene de clientes, a la 602 al completo, digo.
Un abrazo desde Córdoba.
Claudio
como dijo el genral: haz lo que yo digo pero no lo que yo hago!!!.
MENEM, KIRCHNER y TODOS LOS DESCENDIENTES DEL GENERAL HACEN LO MISMO, que no es exactamente lo que vos mencionas NAHUEL.
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