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Para determinar las economías municipales se tuvo en cuenta la cantidad de cajeros automáticos y de sucursales bancarias por cada mil habitantes, volumen de depósitos y de préstamos por habitante e indicadores del patentamiento automotor.
En base a estas variables se elaboró un indicador de la actividad de cada localidad para monitorear el dinamismo de la actividad económica general de la jurisdicción, aunque también se determinaron las tendencias y ritmo de consumo, los municipios más dinámicos para encarar estrategias comerciales localizadas, como así también para generar proyectos de inversiones y del sistema financiero local.
Los indicadores financieros de los veinte municipios ubicados sobre el final del ranking muestran, en la mayoría de los casos, préstamos y depósitos promedios inferiores a los $ 1.000 por habitante.
Los patentamientos totales apenas se ubican en un promedio de 1,2 por cada mil habitantes, y en ningún caso superan las dos unidades.
La provincia de Buenos Aires se ubica en el 13er puesto en el ranking de las provincias con mayores índices de consumo, mientras que Santa Cruz aparece en el primer lugar, seguida de Chubut, Tierra del Fuego y La Pampa.
“Se podría decir que hay tres países en uno, de acuerdo a la realidad del consumo nacional”, advierten desde Abeceb ante la diversidad de los indicadores de demanda.
Para focalizar el estudio de las provincias se tuvo en cuenta el consumo de combustible, de gas, de patentamiento de vehículos y de motos, como así también las ventas en los supermercados.
Así, arrojó que en las provincias del centro del país “la diversidad de los sectores económicos en los que se ubican los empleos hace que existan diferencias en el poder adquisitivo y, por lo tanto, se da un impacto diversificado de la crisis en los indicadores de consumo”.
Además, el sondeo arriesga que “la caída del consumo será mayor en aquellas áreas en las que se concentra la actividad industrial, que es la que sufrirá el mayor ajuste, por su contracción”.
Si bien Buenos Aires se encuentra lejos de los primeros puestos, el desempeño más pobre de las provincias corresponde a las del norte del territorio nacional: Santiago del Estero (21º), Salta (22º), Jujuy (23º) y Misiones (24º).
En tanto, las provincias del centro del país y la Capital Federal se sitúan en la primera mitad del ranking.
La Ciudad de Buenos Aires se encuentra ubicada en el 5º lugar, Córdoba en el 8º y Santa Fe en el puesto 10º.
Solamente cuatro provincias adelantan tres posiciones: San Juan pasa del 15º lugar al 12º, superando a la provincia de Buenos Aires; La Rioja se ubica en la posición 14º; Formosa pasa al 19º lugar, y Santiago del Estero escapa de la última posición para establecerse en el puesto 21º.
El deterioro económico y productivo del territorio bonaerense es notorio, y en lo que va del último año se mantuvo, según la consultora Abeceb.
Así, nuestra región podría ser consi- derada para los inversionistas después del décimo puesto, tomando como datos los relevados por la consultora.
Solamente algunos distritos del interior se ubican en las primeras posiciones de los municipios más prósperos del país, mientras que las localidades del Gran Buenos Aires continúan en los últimos lugares del ranking, por diferentes factores, ya sean éstos mayor densidad demográfica, menores inversiones en lo relativo a la industria y falta de obra pública en muchas de las comunas.
En base a estas variables se elaboró un indicador de la actividad de cada localidad para monitorear el dinamismo de la actividad económica general de la jurisdicción, aunque también se determinaron las tendencias y ritmo de consumo, los municipios más dinámicos para encarar estrategias comerciales localizadas, como así también para generar proyectos de inversiones y del sistema financiero local.
Los indicadores financieros de los veinte municipios ubicados sobre el final del ranking muestran, en la mayoría de los casos, préstamos y depósitos promedios inferiores a los $ 1.000 por habitante.
Los patentamientos totales apenas se ubican en un promedio de 1,2 por cada mil habitantes, y en ningún caso superan las dos unidades.
La provincia de Buenos Aires se ubica en el 13er puesto en el ranking de las provincias con mayores índices de consumo, mientras que Santa Cruz aparece en el primer lugar, seguida de Chubut, Tierra del Fuego y La Pampa.
“Se podría decir que hay tres países en uno, de acuerdo a la realidad del consumo nacional”, advierten desde Abeceb ante la diversidad de los indicadores de demanda.
Para focalizar el estudio de las provincias se tuvo en cuenta el consumo de combustible, de gas, de patentamiento de vehículos y de motos, como así también las ventas en los supermercados.
Así, arrojó que en las provincias del centro del país “la diversidad de los sectores económicos en los que se ubican los empleos hace que existan diferencias en el poder adquisitivo y, por lo tanto, se da un impacto diversificado de la crisis en los indicadores de consumo”.
Además, el sondeo arriesga que “la caída del consumo será mayor en aquellas áreas en las que se concentra la actividad industrial, que es la que sufrirá el mayor ajuste, por su contracción”.
Si bien Buenos Aires se encuentra lejos de los primeros puestos, el desempeño más pobre de las provincias corresponde a las del norte del territorio nacional: Santiago del Estero (21º), Salta (22º), Jujuy (23º) y Misiones (24º).
En tanto, las provincias del centro del país y la Capital Federal se sitúan en la primera mitad del ranking.
La Ciudad de Buenos Aires se encuentra ubicada en el 5º lugar, Córdoba en el 8º y Santa Fe en el puesto 10º.
Solamente cuatro provincias adelantan tres posiciones: San Juan pasa del 15º lugar al 12º, superando a la provincia de Buenos Aires; La Rioja se ubica en la posición 14º; Formosa pasa al 19º lugar, y Santiago del Estero escapa de la última posición para establecerse en el puesto 21º.
El deterioro económico y productivo del territorio bonaerense es notorio, y en lo que va del último año se mantuvo, según la consultora Abeceb.
Así, nuestra región podría ser consi- derada para los inversionistas después del décimo puesto, tomando como datos los relevados por la consultora.
Solamente algunos distritos del interior se ubican en las primeras posiciones de los municipios más prósperos del país, mientras que las localidades del Gran Buenos Aires continúan en los últimos lugares del ranking, por diferentes factores, ya sean éstos mayor densidad demográfica, menores inversiones en lo relativo a la industria y falta de obra pública en muchas de las comunas.
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