Es un momento de reencuentro: soy feliz y siento un gran orgullo

Creo que la conmemoración de un centenario es recuperar valores y revivir esfuerzos y compromisos de aquellas personas que en su momento pelearon con convicción por nuesta independencia, respero y dignidad de ciudadano.

Este es un momento de reencuentro, de identidad patria y de valorización por nuestro patrimonio. Soy feliz y siento un gran orgullo de portar en mi pecho y con un estandarte la celeste y blanco.

Agradezco a mis padres y docentes que me formaron por llevar tan internamente este sentimiento patrio y como docente, ciudadana y madre transmito y educo sobre este sentimiento.

Todos juntos y con gran compromiso eduquemos nuestra juventud valorando, respetando e identificándonos como uno mismo y con iguales metas, ya que somos quienes en nuestra infancia y adolescencia vivimos momentos donde las fiestas patrias eran muy importantes, como así nuestra tradición, cultura y costumbres.

Revivamos este momento de felicidad del 1810 permanentemente y pensemos que no es un tiempo de paso, la vida de este Centenario para nosotros es una sola e irrepetible ,como cada época y período.

Por eso dejemos un buen futuro con vientos firmes y seguros para nuestros hijos y jóvenes, quienes se llevarán nuestros ejemplos de compromiso, valores, respeto y de fidelidad de ciudadano.

Unámonos para poder consolidar entre todos un pensamiento nacional fuerte y con un criterio de responsabilidad ciudadana.

Pensemos como nos gustaría y como quisiéramos que sea ese futuro,este presente y construyamos unidos y convencidos algo mejor para todos.

Levantemos nuestra bandera y luchemos con orgullo portando esos símbolos patrios que nos legaron y gritemos con voz firme: "VIVA LA PATRIA".