Al momento de ingresar Papá no ingería líquidos, sólidos, su cuerpo estaba escuálido, y hacia un par de meses que estaba postrado en una cama.
Con el correr de los días era común que cada vez que me asomaba al comedor una sonrisa se adueñara de mi rostro, y si…estaba sentado en su sillón y algunos de esos seres maravillosos de uniformes celestes, blancos o marrones entre mimos y algún retito lo estaban acostumbrando a comer nuevamente, o tal vez estaba sentado en su sillón merendando y de apoco llegaron los días en que sentado en su sillón COMÍA Solo; cómo se conseguía esto?
El método lo fui descubriendo cada mediodía y cada noche que lo acompañaba: RESPETO, TERNURA, AMISTAD, SOLIDARIDAD, CONTEMPLACIÓN, SABIDURÍA, RESPONSABILIDAD, los ejecutores de método?
Eran fáciles de encontrar: las tres veces que Papá fue trasladado al hospital por sus deshidrataciones o cuadros de hipotensión había momentos en que se iluminaba el rostro cuando lo iban a visitar, estos momentos coincidían con el cambio de turno del personal del geriátrico, claro, ellos aprovechaban la circunstancia y pasaban a darle una palabra de aliento.
Estimado Director, querido Nicolás, cada vez que cruces el cartel que dice “Pabellón Geriátrico” y comiences a recorrer ese largo pasillo hasta el geriátrico mismo, en cada paso, que se te llene el pecho de orgullo porque ANA, CRISTINA, TERESA, SILVINA, CUQUI, SILVIA, JAVIER, SUSANA, ELY, además de hacer sus trabajo como corresponde le agregan HUMANIDAD, una palabra que nos incluye a todos pero es difícil encontrar a quienes la incluyen como parte de sí mismos y para con los demás.
Como corresponde este párrafo aparte es para MARTA, una mujer loable, absolutamente contemplativa y estricta (adjetivos que parecieran no poder estar juntos), sus palabras son justas y sus hechos son JUSTOS, únicamente con equidad y templanza se puede llevar adelante tamaño desafío como el que día a día se enfrenta.
Es hermoso acompañar los primero pasos de un bebe, ayudar a sortear los primeros obstáculos de la infancia, aconsejar para que la adolescencia no sea tan cruel; pero la nobleza de construir un camino lo menos ásperos posible hacia el final de nuestros días sin lugar a dudas es potestad de unos pocos, hoy Papá ya no está, vaya para ese grupo maravilloso que lo acompañó, por intermedio vuestro, el agradecimiento de mi familia y mío desde lo más profundo de nuestro corazón.
Gracias. José Luis Mazzey
Con el correr de los días era común que cada vez que me asomaba al comedor una sonrisa se adueñara de mi rostro, y si…estaba sentado en su sillón y algunos de esos seres maravillosos de uniformes celestes, blancos o marrones entre mimos y algún retito lo estaban acostumbrando a comer nuevamente, o tal vez estaba sentado en su sillón merendando y de apoco llegaron los días en que sentado en su sillón COMÍA Solo; cómo se conseguía esto?
El método lo fui descubriendo cada mediodía y cada noche que lo acompañaba: RESPETO, TERNURA, AMISTAD, SOLIDARIDAD, CONTEMPLACIÓN, SABIDURÍA, RESPONSABILIDAD, los ejecutores de método?
Eran fáciles de encontrar: las tres veces que Papá fue trasladado al hospital por sus deshidrataciones o cuadros de hipotensión había momentos en que se iluminaba el rostro cuando lo iban a visitar, estos momentos coincidían con el cambio de turno del personal del geriátrico, claro, ellos aprovechaban la circunstancia y pasaban a darle una palabra de aliento.
Estimado Director, querido Nicolás, cada vez que cruces el cartel que dice “Pabellón Geriátrico” y comiences a recorrer ese largo pasillo hasta el geriátrico mismo, en cada paso, que se te llene el pecho de orgullo porque ANA, CRISTINA, TERESA, SILVINA, CUQUI, SILVIA, JAVIER, SUSANA, ELY, además de hacer sus trabajo como corresponde le agregan HUMANIDAD, una palabra que nos incluye a todos pero es difícil encontrar a quienes la incluyen como parte de sí mismos y para con los demás.
Como corresponde este párrafo aparte es para MARTA, una mujer loable, absolutamente contemplativa y estricta (adjetivos que parecieran no poder estar juntos), sus palabras son justas y sus hechos son JUSTOS, únicamente con equidad y templanza se puede llevar adelante tamaño desafío como el que día a día se enfrenta.
Es hermoso acompañar los primero pasos de un bebe, ayudar a sortear los primeros obstáculos de la infancia, aconsejar para que la adolescencia no sea tan cruel; pero la nobleza de construir un camino lo menos ásperos posible hacia el final de nuestros días sin lugar a dudas es potestad de unos pocos, hoy Papá ya no está, vaya para ese grupo maravilloso que lo acompañó, por intermedio vuestro, el agradecimiento de mi familia y mío desde lo más profundo de nuestro corazón.
Gracias. José Luis Mazzey